Silvia Méndez/NSN.- Este jueves es el Día de Acción de Gracias (Thanksgiving), una celebración tradicional de este país que se lleva a cabo cada cuarto jueves del mes de noviembre. Generalmente en esta festividad se reúnen en torno a una mesa familiares y amigos para compartir un banquete, aunque religiosa en su origen, el evento está considerado más bien como una tradicional fiesta familiar.
El origen de esta celebración está relacionado con los primeros años de la colonización inglesa en el Nuevo Mundo; en el año 1620 un grupo de colonizadores cristianos, que posteriormente serían conocidos como peregrinos, había llegado a bordo del barco Mayflower, desembarcando en el mes de noviembre, en la costa de Massachusetts y cumpliendo sus propósitos al establecer la Colonia en lo que ahora es Plymouth.
El riguroso invierno en esas latitudes les tomó por sorpresa, sin tener tiempo para prepararse para las duras condiciones de privaciones y fríos, por eso del centenar de peregrinos solo sobrevivió la mitad que debió su suerte a la ayuda y alimentos que los nativos de la zona, los indios Wampanoag, les proporcionaron.
En el otoño de 1621, ya establecidos y con la primera cosecha recolectada, los sobrevivientes decidieron compartir sus frutos con los indios que les ayudaron cuando ellos no tenían recursos y el gobernador de la colonia proclamó “un día de dar gracias al Señor para que podamos, de una manera más especial, regocijarnos después de haber recogido el fruto de nuestro trabajo”. Esa convivencia con los nativos duraría pocos años ya que la masiva afluencia de colonos europeos y la ocupación creciente de los territorios de los indígenas los llevaría a enfrentamientos continuos. El resultado de tales luchas fue la casi total exterminación de los indios Wampanoag.
En 1789, el presidente George Washington, proclamó la fecha como día nacional de Acción de Gracias, y en 1863, Abraham Lincoln declaró que la celebración se realizara como fiesta nacional, sin embargo, no fue hasta 1941 cuando el Congreso Federal estableció dicha fecha como fiesta oficial.
Hoy, y tocando el tema del origen religioso de esta festividad, el padre Mike Boehm, de la Parroquia del Santísimo Sacramento, dijo a Nuevo Siglo que “el Thanksgiving es un día para todos los que tienen fe, para darnos cuenta que no somos nada sino estamos bendecidos por Dios, las bendiciones son las mismas personas, la familia, la parroquia, la comunidad que trabaja para conseguir justicia. A veces solo es un día para comer pavo, y nada más, pero también hay quienes practican su propia fe y se reúnen para compartir la comida, tal como lo fue en sus orígenes”.
Según el padre Mike, para la fe católica este Día de Acción de Gracias es el compartir la comida “y como católicos nuestra comida, nuestra acción de gracias, es la Santa Misa”. El representante de la iglesia enfatizó que “Acción de Gracias, es un día especial, porque en la Parroquia del Santísimo Sacramento celebramos la misa bilingüe, celebramos que la Eucaristía es el Cuerpo de Cristo y que estamos bendecidos porque Dios nos envió a su hijo, Jesucristo, que libremente murió en la Cruz para perdonarnos, y cada persona que es pecadora puede tener un momento de perdón y de paz”.
Sostuvo, además, que se alegra de “que los hispanos que celebran esta fiesta, a veces no comen pavo, se come tamales, arrachera… Algo que tienen los latinos es que cada fin de año celebran Acción de Gracias por un año de bendiciones y les gusta arrepentirse haciendo una confesión y comenzar el nuevo año bien con Dios”.
Finalmente, dijo que “El Día de Acción de Gracias, es un día en que todas las razas que componen una parroquia se reúnen para celebrar la misa juntos, dando gracias por la fe en Cristo”.