NSN.- El programa de legalización migratoria, presentado ya en el Senado para su estudio y discusión, representa el esfuerzo más grande de este tipo en la historia de la Nación, afectando a tres veces más la cantidad de inmigrantes beneficiados, comparada con la aprobada durante el gobierno del presidente Ronald Reagan en 1986.
La fuerza agrícola que ha quedado con manos que trabajen legalmente en el campo, será transformada por un nuevo programa de trabajador “invitado” designado atrae a más de 300,000 trabajadores inmigrantes en la próxima década a los campos de los Estados Unidos y se les proveerá el derecho de ser puestos en una ruta hacia la ciudadanía en 10 años. Un nuevo programa de visas será creado para trabajadoras de limpieza, obreros de yardas y jardines y otras ocupaciones que requieren bajo nivel académico, mientras, será aumentada al doble la cantidad de visas para profesionales de la industria de alta tecnología.
La ley escrita por los ocho senadores, cuatro republicanos y cuatro demócratas, hará que el gobierno federal aumente el presupuesto para vigilar la frontera con detectores de alta tecnología, y aviones no tripulados (drones).
Aunque el Congreso no se ha puesto de acuerdo en años recientes sobre una nueva ley inmigración, los líderes de ambos partidos creen que lo propuesto esta semana tiene grandes posibilidades de ser aprobado en el Senado, donde su plan de reforma será debatido en mayo y podría entrar en efecto, ya convertido en ley, para finales del año.
El cambio ha sido impulsado por el crecimiento del poder político de los latinos, muchos de los cuales han hecho el caso de la inmigración su prioridad, parece haber roto barreras.
El nuevo plan requiere:
1.- Una frontera más segura con México antes de que se apliquen todos los planeamientos de la nueva ley.
2.-Tres billones de dólares para incrementar la vigilancia de alta tecnología y la frontera, podrá ser considerada segura si en un lapso de cinco años es rechazado el 90 por ciento de las personas que intenten cruzarla ilegalmente. Se invertirán adicionalmente $1,500 millones de dólares para doblar las tareas en la construcción de más y mejores bardas en la frontera con la ayuda de guardias fronterizos y parte del mismo fondo irá a los gobiernos locales para que empleen a más guardias de seguridad.
3.- Seis años después de que la ley empieza a ser aplicada la mayoría de los 11 millones de indocumentados que han estado aquí desde antes del 31 de diciembre del 2011 y no tienen graves antecedentes penales, podrán aplicar para un estatus legal de probatoria. Eso hará que tengan que pagar $500 dólares como multa inicial así como una cuota por la aplicación y dar los impuestos no pagados en el pasado. Ese estado de probatoria será de seis años y será renovado con un pago de otros 500 dólares.
4.- Dos grupos recibirán un paso rápido hacia la ciudadanía, los que fueron traídos ilegalmente siendo niños y los trabajadores agrícolas que serán elegibles para la tarjeta de residencia a los cinco años si prometen que continuarán trabajando en el campo y de esta forma serán puestos en vías a obtener la ciudadanía.
5.-Durante 10 años arreglará a aproximadamente 4 millones de personas que han estado en la lista de espera en decenas de países, mientras se cumplen los 10 años, plazo para que la mayoría de los 11 millones empiece a recibir las visas como residentes permanentes. Tres años después de esos 10, podrán empezar sus trámites de ciudadanía.
6.- La misma ley requerirá que todos los patrones revisen electrónicamente la legalidad de residencia de la persona que emplearán con el E-verify. La aplicación general del sistema costará al gobierno federal otros $1,500 millones de dólares.
Se da como un hecho de que la reforma presentada por los ocho senadores pasará con facilidad, pero la misma será recibida en la Cámara Baja donde los congresistas preparan su propia versión de la ley.
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