NSN.- La Arquidiócesis Católica de Chicago se ha negado a dar niños y niñas de crianza a padres homosexuales en unión civil, lo que ha dado pie para que el gobierno retire todo su financiamiento para la labor de la agencia Caridades Católicas.

El gobernador Pat Quinn dijo esta semana que la práctica de distinción anunciada por Caridades Católicas, la agencia encargada de la labor de adopciones temporales, no era compatible con las leyes del estado y que no podía dar fondos a esta agencia solamente para que colocara niños de crianza a padres y madres unidos en la tradicional forma de matrimonio.

Sin embargo, el martes un juez se rehusó que el estado cortara los lazos con Caridades Católicas que, por lo menos en los próximos 30 días continuará sirviendo en la supervisión de 2,000 casos de este tipo de adopciones.

La decisión deja tranquilos, por ahora a padres con hijos de crianza, en base a contratos ya hechos con las ciudades de Peoria, Joliet y Springfield. “No vamos a quitarle los niños a nadie”, dijo el juez John Schmidt.

Pero en unos meses, la relación entre Caridades Católicas y el departamento de Niños y Servicios Familiares de Illinois, quedará completamente terminada, algo que ya se veía venir debido a la aprobación de las uniones civiles de parejas homosexuales que ya pueden ser padres de crianza bajo la nueva ley de Illinois.