NSN.- La ciudad de Chicago forma parte desde esta semana, de un esfuerzo nacional para hacer que cada inmigrante residente legal se convierta en ciudadano de los Estados Unidos, y el gobierno municipal del alcalde Rahm Emanuel encabeza el esfuerzo junto con lo que hacen los gobiernos de Los Ángeles y Nueva York.

La campaña, patrocinada por Cities for Citizenship (Ciudades por la Ciudadanía), es una iniciativa financiada con más de un millón de dólares aportados por Citigroup, para enfrentar los gastos incurridos por una docena de áreas metropolitanas de Estados Unidos.

El programa será coordinado por The Center for Popular Democracy y por la National Partnership for New Americans, organizaciones sin fines lucrativos cuya meta es convencer a los gobiernos de la mayor cantidad posible de gobiernos municipales de ciudades como Chicago, que inviertas en campañas de ciudadanía, según el comunicado de prensa dado a conocer por la oficina del alcalde Emanuel.

En Chicago, es la acción pro-inmigrante más reciente de Emanuel quien disgustara a la comunidad inmigrante de la nación por sus posturas en contra de la causa de la Reforma Migratoria, aparte, podría representar también una oportunidad para que el Partido Demócrata amplíe su base. El alcalde apareció en el pasado mes de mayo en Washington con el congresista Luis Gutiérrez para hablar de la necesidad de una reforma migratoria.

Políticamente el Cities for Cizenshipo Program, representa otra oportunidad para que el alcalde de Chicago trate de establecer sus credenciales de progresista ante el electorado hispano que no lo ha favorecido y que en la encuesta del mes pasado apareció sin una opinión muy favorable con un 40 por ciento opinando a su favor.

El concejal Bob Fioretti, quien el pasado domingo desfiló muy atrás de los principales dignatarios entre los que se encontraba Emanuel, se dedicó a saludar a miles de las personas que presenciaban el desfile de la calle 26. Fioretti, candidato a alcalde desde el pasado fin de semana, criticó al alcalde por permanecer alejado de la clase trabajadora de la ciudad.

Con Chicago como participante de esta campaña nacional de ciudadanía, Emanuel compartirá créditos y méritos con el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio quien es una figura importante que podría hacer que el Partido Demócrata recupere sus credenciales de “progresista”.