NSN.-La controversia sobre un inmigrante indocumentado que huyó después de que pagara una fianza no hará que sea eliminado un nuevo reglamento del condado de Cook que impide la deportación de inmigrantes indocumentados.
Lo anterior fue expresado por la presidenta del condado, Toni Preckwinkle, quien con el comisionado Jesús García logró el año pasado que se aprobara la nueva medida para impedir que todo inmigrante indocumentado detenido por los oficiales del Sheriff, fueran entregados a inmigración y deportados, lo que, según los comisionados que lo aprobaron, era costoso y hacía que fueran deportadas personas que habían sido detenidas por violaciones menores de tránsito.
Saúl Chávez, quien manejaba ebrio mató a un transeúnte en el barrio de Logan Square, fue detenido, después, sus hermanos pagaron $25,000 dólares de la fianza impuestos por el juez de $250,000. Al quedar en libertad, Chávez huyó y hoy es buscado por las autoridades, inclusive por el FBI.
Lo anterior desató la ira por parte de los familiares de la víctima, William “Denny” McCann quienes han atacado no tanto a Chávez, sino al nuevo reglamento del condado y particularmente a Preckwinkle y a García. Uno de los cinco comisionados que votaron contra la medida aprobada por 10, inició una iniciativa para eliminar el reglamento.
El miércoles, la presidenta declaró que se puede modificar el sistema de fianzas para impedir que los detenidos por delitos graves huyan a su país de origen, pero reafirmó su apoyo a la ley que, libera de temores a cientos de inmigrantes indocumentados detenidos por la policía cada semana y libera al condado del empleo de millones de dólares en el proceso de detención y traspaso de las autoridades condales a las federales.