NSN.- El español David Ferrer se vio como una máquina que no falla, y en la noche del sábado anterior, se coronó tricampeón en el Abierto Mexicano Telcel y confirmó que no había en Acapulco un solo tenista que pudiera detener su paso, luego de acabar con su compatriota Fernando Verdasco con parciales de 6-1 y 6-2.
Verdasco fue incapaz de detener a Ferrer debido al potente juego que exhibió, de paso, hizo ver lo peor de Verdasco y lo derrotó en apenas en una hora con nueve minutos, el campeón ganó la semana previa la Copa Claro en Buenos Aires y el pasado 14 de enero, el Heineken Open en Auckland, Nueva Zelanda, para mantenerse como uno de los jugadores más regulares del año.
Su triunfo del sábado pasado se suma a los conseguidos en el Abierto Telcel en 2010 y 2011 y se puso a sólo uno de alcanzar al austriaco Thomas Muster, ganador de las primeras cuatro ediciones de este torneo, además, con los 500 puntos, ATP podrá recuperar la quinta posición de los rankings, superando al francés Tsonga.
Casi desde el principio del juego se notó que Ferrer no quería dar ventajas y que tenía prisa por recibir el cheque de $277,915 dólares, pues necesitó solamente 30 minutos para llevarse el primer parcial por 6-1 y de ahí en adelante, se encaminó a su tercera corona consecutiva.