NSN.- De la mano de Landon Donovan y David Beckham, el Galaxy de Los Ángeles ganó el campeonato de la MLS, o (Copa MLS 2011), al imponerse 1-0 al Dynamo de Houston, ante una asistencia récord de 30,281 aficionados en el Home Depot Center de Carson, CA.

El gol del campeonato fue anotado por el capitán angelino, Landon Donovan, quien terminó con una sequía de títulos de seis años a nivel individual y le brindó al Galaxy la tercera Copa MLS en su corta historia, además, fue seleccionado como “el jugador más valioso” del encuentro final.

El partido se desarrolló con buen ritmo, aunque en la segunda parte la lluvia opacó un poco las acciones, pero poco a poco, el Galaxy comenzó a mostrar su jerarquía con Donovan adelante, manteniéndose “prendido” durante todo el partido y tanto éste como Robbie Keane y Beckham, con sus tiros libres, mantuvieron a raya al Dynamo.

Por Houston, quien tuvo en un palco a uno de sus famosos dueños (Oscar de la Hoya), destacaron Geoff Cameron, Danny Cruz, Corey Ashe y Moffat, pero el gol nunca pudo aparecer en la primera parte y en el complemento, los visitantes arriesgaron más, usando la velocidad de Ashe, quien asustó con un tiro a los 58 minutos, y luego, a los 61’, cuando incomodó con un centro a Saunders, quien supo responder al final, y Moffat, otra vez a los 66, luego vendría el ingreso de Carlo Costly, para reemplazar a Carr, pero el gol no llegaba.

Cuando todo parecía indicar que se forzaría a los tiempos extras, a los 72 minutos, Keane recogió un balón afuera del área y después de dejar pasar a Donovan metió un pase filtrado, para que el llamado “Capitán América” lo tomara y pusiera el balón al fondo de la red. Inmediatamente después, el Galaxy atrasó sus líneas, dejando el contragolpe como su opción de ataque y unos 7 minutos después Donovan estuvo cerca de su doblete, pero su tiro de media distancia fue tapado a dos tiempos por el portero de Houston.

De esta manera, el Galaxy se convirtió en uno de los mejores equipos en la historia de la MLS con su tercer Copa, y el doblete en este año, al ganar el “Supporters” Shield y la Copa MLS, quedaron cerradas las acciones de fútbol en el país, adelantándose que Beckham posiblemente haya jugado su último partido en el circuito, al terminar su contrato con el equipo angelino.