El racismo radica en el cerebro

Los hallazgos de la profesora de Psicología de la Universidad de Stanford, Jennifer Eberhardt, de que lo que afecta las diferencias sociales basadas en el color de la piel, tienen un básico proceso de percepción y son un ejemplo maravilloso de un pensamiento creativo en la importancia del comportamiento de la sociedad.
Jennifer Eberhardt, ha sido premiada en la categoría de “Genio” por sus estudios por la Fundación McArthur.

Otros recientes hallazgos proveen una amplia explicación que apoyan lo descubierto por la especialista.

Con el pensamiento tradicional, se asume que nuestra experiencia envuelve dos pasos que son procesados en el cerebro: el sistema de los sentidos que hacen un análisis objetivo basado en su ambiente social que estimula bretones cerebrales. Por eso el puro análisis objetivo de los sentidos está equivocado.

No hay pureza en lo que percibe el cerebro, es la persona la que debe practicar dándole un sentido puro a las diferencias, este análisis puede ayudarnos a explicar la asociación entre las personas afroamericanas y el crimen, lo que hace que las personas blancas vean las armas como la mejor respuesta ante caras negras.

Lo bueno del estudio es que indica, cómo pueden revertirse esas ideas, con educación, construyendo nuevas asociaciones que ajusten en nuestros cerebros la justa percepción sobre los demás.

You must be logged in to post a comment Login