No pudimos “ser testigos de la historia”, en efecto, existían muchas posibilidades de que Derek Jeter conectara su hit número 3,000 este fin de semana en el Wrigley Field, pero el estelar parador corto de los Ynquis se lesionó la pantorrilla derecha el martes, justo cuando está a seis imparables de esta marca, y es que dos juegos más por disputar a los Rangers y tres en el Wrigley Field, donde hoy inicia una serie New York, calculábamos que aquí impondría la marca, pero la misma se pospone, tal vez hasta el julio próximo. Jeter no había ingresado a la lista de lesionados, desde 2003.
Todo ese relajo de los “dopados” que provocó la propia Federación Mexicana de Fútbol, se está esclareciendo luego que le mismo ente deportivo a través de un comunicado de prensa afirmara que el segundo examen antidopaje realizado el pasado 10 del actual a los cinco jugadores mexicanos, resultaron negativos. Pero éstos: Guillermo Ochoa, Francisco Javier Rodríguez, Edgar Dueñas, Antonio Naelson y Christian Bermúdez, personalmente estuvieron ante las autoridades del Laboratorio de UCLA para solicitar la apertura de las pruebas B correspondientes a la toma de muestra del pasado 21 de mayo.
La conclusión es fácil, ninguno de los cinco son culpable, los culpables son los directivos de la FMF y ya se habla de “un amigo” de Justino Compeán, quien es el encargado de introducir carne a la cocina del centro donde entrenan los seleccionados, pero lo más importante es la Agencia Mundial Anti-doping (WADA), ya indicó que habrá castigo para los cinco jugadores, sanciones que van de 6 meses a dos años, y si esto se concreta, como todo parece indicar, creo que la FMF deberá pagar salarios a los cinco y el precio de sus cartas a sus clubes Sinha ya aseguró que “no descansará hasta probar su inocencia en el caso de dopaje en que está envuelto”, aunque aclaró que no cree que haya culpables en este caso.
Y siguiendo con el fútbol, pero en referencia a la afición que asistió al doble juego del domingo en el Soldier Field, pues una vez más (no todos) volvió a demostrar su falta de civismo, una gran cantidad de aficionados nunca se puso de pie cuando se escucharon los himnos nacionales de Estados Unidos, Cuba y El Salvador, pero eso fue lo menos que hicieron y repito, no todos, porque cuando le cometieron una falta a Torres Nilo, empezó a “llover” cerveza, cayendo encima de niños y mujeres, ¡qué vergüenza!, eso no pasa ni siquiera en el fútbol americano, ni siquiera en un juego entre Osos y Empacadores, ¡ah! Pero cuando viene el Tricolor…”mostramos el cobre”.
Breves muy breves…Jake Peavy, le sigue debiendo a los Sox y a su afición una buena temporada desde que llegó de San Diego, está pidiendo que lo usen como sea, inclusive como relevista…y de los Cubs, mejor ni hablamos, los “Cachorritos” están 12 juegos debajo de la marca de los .500…me atrevo a pensar que las leyes anti-inmigrantes que están surgiendo en Arizona y Alabama y otros estados de la Unión, con el comportamiento de nosotros y una de las pruebas más palpables de “como somos”, la vimos el domingo en el Soldier Field…hasta la próxima.