NSN.- La tercera confrontación entre Manny Pacquiao y Juan Manuel Márquez, parece que es la que más a animado al filipino, quien se ha molestado mucho por lo que ha venido diciendo el mexicano, “de que él ganó las peleas anteriores”, y el entrenador de Pacquiao, Freddie Roach, dijo que por eso su pupilo entrena duro, porque quiere terminar con todas las dudas, en lo que puede ser (debe ser), la última pelea entre ambos.
El combate esta pactado para el próximo sábado 12 del actual, pero Pacquiao admite que se siente insultado por la insistencia jactanciosa de Márquez, alegando que ganó sus dos primeros combates, los cuales terminaron en un empate en 2004 y una decisión dividida para Pacquiao en el 2008. En aquella ocasión, por cierto, Márquez viajó a Filipinas para exponer su caso al público, vestido con una camiseta que decía: “nos han robado”.
El inigualable campeón en ocho divisiones, se entrena meticulosamente, como nunca antes, y es que los dos combates anteriores entre ambos fueron una deslumbrante muestra de estilo y coraje, con la agresión y la resistencia de Pacquiao, haciendo frente al contragolpe y las combinaciones de Márquez en 24 fascinantes rounds, en los cuales Pacquiao derribó a Márquez tres veces en la primera ronda de la primera pelea, y derribó a Márquez una vez en la revancha, pero Márquez se recuperó en ambas ocasiones para hacer que los combates terminasen parejos y haciéndole más daño a Pacquiao que cualquier otro rival en la última década.
Es por eso que Pacquiao está haciendo combates de práctica más agresivos y corriendo más kilómetros que de costumbre, también está entrenando de manera más inteligente, indicando que el tercer combate contra Márquez, parece más que personal para él, porque, si en los dos combates anteriores habían quedado algunas dudas, quiere asegurarse de que después de la pelea del próximo sábado, no quede una sola.
Uno de sus preparadores ha manifestado que Pacquiao “siente desprecio por el hombre (Márquez), y nunca he conocido a nadie que no le agrade… Manny sigue siendo un buen chico y todo, pero hay algo muy ‘Tercer Mundista’ en él cuando quiere ser así. Puede ser muy despiadado. Yo lo he visto, y ha pasado un largo tiempo desde que lo vi así por última vez. Por lo general, cuando ve que sus oponentes no pueden más, afloja”.
Por el otro lado, se ve poco probable que el filipino reciba un abrazo del mexicano, un competidor implacable de la tradición de la vieja escuela de púgiles aztecas, y es que, tanto el boxeador como su entrenador, Nacho Beristain, siguen resentidos por la derrota en la segunda pelea, cuando Beristain alegó una improbable corrupción entre los jueces que decidieron que Pacquiao ganó por una ronda en la tarjeta de uno de ellos.
Pacquiao subirá como amplio favorito e insiste en que no se sentirá decepcionado si no noquea a Márquez, pero sus entrenadores se sorprenderán si no es así, el combate por el título welter de la OMB se disputará en un peso acordado de 144 libras y Pacquiao pelea con comodidad en un peso que Márquez sólo ha intentado una vez, en una derrota unilateral ante Floyd Mayweather Jr.