NSN.- Una histórica institución religiosa ubicada al oeste del barrio de Humboldt Park, todavía podría dar mejores años de servicio a toda la comunidad, hoy integrada por afro-americanos y puertorriqueños que no vivían en esa área cuando en 1958 un incendio en la escuela parroquial cobró la vida de 92 estudiantes y tres monjas.

Después de la tragedia, se realizaron esfuerzos porque continuara la misión religiosa y social pero varios factores hicieron que los edificios parroquiales quedaran casi en total abandono, hasta hace tres años.

Hoy, el complejo de edificios iniciado con la construcción de una iglesia dedicada a Nuestra Señora de los Ángeles, fundado en 1894 por inmigrantes irlandeses, es objeto de un gran esfuerzo encabezado por el padre Bob Lombardo, nombrado hace dos años por el cardenal y arzobispo de Chicago para reactivar la institución, empieza a dar resultados.

Con el trabajo del Padre Lombardo, no solo se celebrarán misas en el templo ubicado en la esquina de las calles Hamlin y Iowa, sino también se ha sido activado un centro de servicios de emergencia a los pobres del área.

El Rev. Lombardo fue traído por el Arzobispo debido su fama que cobró en Nueva York como gran administrador y recaudador de fondos para causas caritativas. Hace varios meses se consiguieron 2.2 millones de dólares para reparar el templo y se espera que el bello edificio de ladrillo estilo neoclásico y con enormes vitrales, se esté celebrando misa en el mes de abril.

Aparte de las tareas caritativas que son constantes, los trabajos de reparación y reconstrucción de los cuales forman parte hermanas franciscanas como Kate O’Leary y Alicia Torres. Uno de los voluntarios es Gonzalo Ponce.