NSN.- Bubba Watson necesitó cuatro rondas y dos hoyos de desempate para ganar el Masters, su primer torneo grande, luego de atrapar al líder, Louis Oosthuizen, durante los nueve hoyos en la última ronda del domingo, para forzar el playoff a pura valentía, con un increíble tiro desde los árboles en el segundo hoyo de definición, para encaminar a la victoria.
Oosthuizen, reconoció la labor de su rival al indicar: “Yo jugué bien. No siento haber jugado mal. Lo de él fue grandioso. Lo merece”. Y es que Oosthuizen fue el líder durante casi toda la jornada, pero Watson atrapó al sudafricano con cuatro birdies consecutivos entre los hoyos 13 y 16 para forzar el desempate.
En el primer hoyo de playoff, ambos hicieron par, luego de necesitar dos putts en el green del 18 y debieron pasar al hoyo 10. Allí, los dos fallaron su tiro de salida con Watson desviando su drive hacia los árboles y Oosthuizen quedando a 253 yardas de la bandera, en el segundo rough.
El sudafricano jugó primero y le pegó bajo, dejando la pelota afuera del green. Watson entonces pegó un magnífico tiro desde los arbustos, a 155 yardas, dejando su bola a 10 pies del hoyo. Oosthuizen dejó su tiro de aproximación lejos de la bandera, pero en su siguiente tiro, la pelota besó el hoyo y salió por la derecha, obligándolo a firmar el bogey.
Con dos tiros para ganar, Watson se pasó apenas del hoyo en su primer intento y sin poder contener las lágrimas, embocó el último putt de compromiso para consagrarse como nuevo campeón del Masters y obtener el primer Grand Slam de su carrera.
Uno de los favoritos, Tiger Woods, tuvo problemas por cuarto día consecutivo, firmando un 74, 2 sobre par, para terminar +5 en el campeonato, siendo su peor resultado. Tampoco fue buen torneo para otro favorito, Rory McIlroy, quien tras amenazar con contender en la segunda ronda, se desbarrancó el fin de semana para terminar con un +4 el domingo, +5 en el campeonato.